Déjame contarte la historia sin siglo la ruina del horror. Sucedió hace poco y ahora se repite en el fiel corazón. Quien acusa miente y su ser no encierra un verso del amor. Otorgó su carnada y ahora no puede vencer la fina flor. Su polvo es vacío y hoy ya se aleja soplado por el don. Déjame contarte la noticia increíble: la muerte murió. ¡Jesús la derrotó! (Abril 2001)